Uno de los aspectos más desafiantes para quienes realizan trámites migratorios en Estados Unidos es la duración del proceso. Ya sea para solicitar una visa, renovar un permiso de trabajo, ajustar el estatus migratorio o aplicar a la residencia permanente, los tiempos de espera pueden variar considerablemente dependiendo del tipo de trámite, la oficina que lo procese y los cambios en las políticas migratorias.
Durante el año 2025, las autoridades migratorias han publicado nuevas estimaciones y actualizaciones en relación con los tiempos de procesamiento. Conocer esta información puede ayudarte a planificar mejor tu proceso y evitar situaciones de incertidumbre.
En primer lugar, es importante destacar que los tiempos de espera han mejorado ligeramente en algunos trámites debido a la digitalización de procesos. El formulario I-765 (permiso de trabajo), por ejemplo, se está tramitando en un promedio de 2 a 6 meses, dependiendo del centro de servicio. Si bien esto representa un avance en comparación con años anteriores, aún existen demoras en áreas con mayor volumen de solicitudes.
Para quienes solicitan la tarjeta de residencia (Green Card) por ajuste de estatus dentro de EE.UU., el tiempo estimado sigue siendo de 12 a 24 meses. Este rango depende principalmente del distrito migratorio donde se haya presentado la solicitud. Algunas oficinas han habilitado sistemas de citas más flexibles y opciones de presentación en línea que agilizan la recepción de documentos.
En el caso de peticiones familiares (formulario I-130), los tiempos pueden extenderse aún más. Peticiones de ciudadanos estadounidenses para cónyuges o hijos menores suelen tardar entre 10 y 14 meses. En cambio, peticiones para hermanos o padres pueden superar los 24 meses. El USCIS ha reiterado la importancia de presentar formularios completos y actualizados para evitar retrasos adicionales.
Otro proceso afectado por los tiempos de espera es el de naturalización (formulario N-400). En 2025, el promedio nacional para obtener una cita de entrevista de ciudadanía es de 8 a 12 meses después de presentar la solicitud, aunque hay ciudades donde el proceso puede demorar más. Esto se debe a la alta demanda y a la disponibilidad limitada de agentes en algunas oficinas locales.
Respecto a las visas de no inmigrante, como las visas de turista (B1/B2) o de estudiante (F1), el Departamento de Estado ha publicado que las citas en los consulados estadounidenses en América Latina y otras regiones pueden demorar entre 3 y 10 meses. Algunas embajadas han implementado sistemas de priorización para casos urgentes, como emergencias médicas o viajes por trabajo esenciales.
Una recomendación clave para 2025 es revisar regularmente el sitio web oficial del USCIS, donde puedes encontrar una herramienta llamada “Check Case Processing Times”. Esta función te permite ver los tiempos actualizados según el tipo de formulario y la oficina que lo procesa. Además, es importante registrar tu caso en la plataforma “Case Status Online” para recibir notificaciones por correo electrónico o mensaje de texto.
También conviene estar atento a las alertas migratorias y actualizaciones oficiales en el Federal Register, donde se anuncian cambios importantes en los procedimientos, requisitos y tiempos. Estos comunicados pueden indicar extensiones de plazos, cambios en tarifas o nuevas políticas de priorización.
Conclusión
Los tiempos de espera en trámites migratorios en EE.UU. durante 2025 continúan siendo un factor importante a considerar en la planificación de cualquier proceso. Aunque algunos trámites han sido agilizados, otros siguen enfrentando demoras debido a la demanda o a ajustes internos en las agencias. La clave está en estar bien informado, preparar la documentación con tiempo y mantener un seguimiento constante del estado de tu solicitud.